¿Quieres trabajar como ilustrador? El mundo de la ilustración está lleno de creatividad y oportunidades. Trabajar como ilustrador freelance tiene la ventaja de que podrás escoger tus colaboraciones, crear imágenes e identidades para diferentes tipos de clientes y controlar tu vida laboral.
Estos 5 consejos te ayudarán a comprender mejor este sector y ver si encajas en él.
1. Fórmate continuamente
Por supuesto, para ser un buen ilustrador, debes tener vocación. También hay personas que digamos tienen una “habilidad innata” y se les da mejor que a otras dibujar. Pero esto es solo el comienzo, ser ilustrador freelance no es fácil. Es complicado encontrar un puesto profesional sin una buena formación. Por ello, nuestro primer consejo, si no has estudiado ya algo relacionado, es que no dudes en realizar cursos de ilustración (básico, avanzado, profesional). Incluso si ya tienes estudios, nunca está de más formarse continuamente y aprender nuevas técnicas o herramientas útiles para tu futuro laboral.
2. Crea un buen portfolio
Es muy importante a la hora de buscar trabajo como freelance, que cuentes con un portfolio que muestre tus mejores trabajos. Si has hecho algún curso que incluya prácticas, esos ejercicios te servirán para tenerlos en cuanta como experiencia en tu CV, y para aprender a trabajar de forma profesional. Lo más importante es que te ayudarán a obtener un buen portfolio y demostrar tus conocimientos y habilidades como ilustrador. Además, ten en cuanta que el propio portfolio es tu mejor carta de presentación. Las empresas valorarán mucho el potencial creativo y la originalidad de este.
3. Cuenta con un espacio y material de trabajo adecuado
Trabajar desde casa es una de las mejores opciones para un ilustrador freelance. Te permitirá ahorra en alquiler y gastos de desplazamiento etc. Aunque, dependerá también de cada situación y de lo que prefieras.
Lo ideal es disponer de un espacio propio, una habitación independiente o un rincón de tu dormitorio, donde tengas todo a mano y haya tranquilidad. Si no es tu caso, otra opción es trabajar en un coworking. Tendrás la independencia deseada y, además, podrás socializar más y compartir experiencias con otros profesionales. ¡Tú decides!
También es muy importante que cuentes con un buen equipo de trabajo. Un escritorio o mesa amplia y una silla cómoda, material de dibujo de alta calidad, un buen ordenador, portátil o tableta gráfica para trabajos específicos y lo último en programas de diseño. Aunque parezca un gran gasto, todo lo que se inviertas en este sentido lo recuperarás con el tiempo. Como en cualquier sector, para ser un buen profesional se necesita un buen equipo.
4. Aprende a priorizar y planificarte
Un aspecto fundamental para trabajar como freelance es la organización. Hoy en día es muy fácil distraerse con cualquier cosa y terminar perdiendo el tiempo en las redes sociales. Si te pasa esto a menudo, intenta organizarte como si tuvieras que fichar en una oficina. Planifica la rutina que mejor se adapte a ti, e intenta llevar unos horarios. Si no lo haces, es probable que termines trabajando de madrugada o los fines de semana… Aunque hay profesionales que lo prefieren así, lo mejor es ajustar las rutinas y contar con tiempo libre. Sé realista y establece objetivos alcanzables. Puedes utilizar planificadores semanales, agendas, calendarios… Lo importante es que seas productivo disfrutando de una jornada laboral a tu manera.
5. Difunde tu trabajo y date a conocer
Hoy en día las redes sociales son la mejor manera que tenemos para darnos a conocer al mundo y conseguir clientes. Crear una web o un blog, tener tu propio canal de Youtube y publicar tu trabajo por Instagram, Facebook, Linkedin, Twitter y TikTok es algo imprescindible para los ilustradores de nuestra generación.
El gran reto es poder destacar entre tantos perfiles similares… Pero no te rindas, ¡todo se puede conseguir! En este periódico estamos para eso, no dudes en escribirnos para entrevistarte. Te haremos un hueco en nuestro rincón de ilustradores para que la gente te conozca 😊

